El camino de la libertad
Ley Natural

La alquimia de la transformación interna.

En toda la existencia solo el hombre necesita normas, ningún animal lo necesita, vive de acuerdo a las leyes naturales, las inmutables, las que permiten y desarrollan la vida.

El hombre perdió su condición natural.

Las normas son artificiales.

El hombre dejó de ser un animal, pero aún no llegó a ser un HOMBRE, un homo desarrollado, está en el limbo, por eso necesita normas. Si fuese un animal , no las necesita.

Si el hombre se hace hombre, no solo nominalmente, sino verdaderamente, no necesita ninguna norma.

Muy pocos hombres se han realizado hasta ahora. Sócrates, Zaratustra, Bodhidharma, no tenían necesidad de ninguna norma.

Estaban lo suficientemente alertas para no hacer daño a nadie. No tenían necesidad de ninguna norma, ninguna constitución.

Si todo el pueblo evolucionara hasta ser auténticamente hombres, habrá amor, pero no habrá normas.

El humano es el que necesita normas, leyes, gobiernos, tribunales, ejércitos, fuerzas policiales, porque ha perdido la conducta natural de un animal y aún no ha vuelto a obtener un nuevo estado natural, está justo entre medio, en el limbo. No está en ninguna parte, está perdido, es un caos. Y para controlar ese caos necesita todas esas normas.

Y el problema se volvió complejo, porque las fuerzas que se han desarrollado para controlar al humano, las religiones, los estados, los tribunales, se han vuelto muy poderosas, porque era necesario desarrollar la esclavitud, el comercio de los hombres y el desarrollo de las propiedades en la tierra. Se ha desarrollado un dios muy poderoso, que es el dinero, que pertenece a unos pocos y se hace tener la ilusión al pueblo que pueden obtenerlo, siendo mejores esclavos y cumpliendo mejor las normas, detrás de frases como orden y progreso. Las sociedades son el resultado, la creación del comercio.

Se enseñó a desarrollar las sociedades en detrimento de los individuos, porque si los individuos evolucionan, la sociedad muere.

La sociedad existe solo porque no se permite evolucionar al individuo.

Esos poderes han estado controlando al hombre durante siglos, disfrutando de su poder y de su prestigio, encarnado en bufones, títeres propagados por los medios de difusión, primero los libros y las revistas, luego la televisión con sus películas y noticieros y después con el internet, las series, las redes sociales, la propaganda y el marketing, siempre desarrollados.

El objetivo es que el hombre no se desarrolle, porque si lo hace ellos y sus instituciones serán inútiles.

Sucedió en China, hace veinticinco siglos:

Lao Tse fue muy famoso, un sabio, sin duda alguna uno de los hombres más sabios de todos los tiempos.

El emperador de China le pidió muy humildemente que fuera el jefe de su tribunal supremo, porque nadie podría guiar las leyes del país mejor que él. Él trató de convencer al emperador «no soy la persona adecuada», pero el emperador seguía insistiendo. Lao Tse dijo:

– «Si no quiere usted escucharme…con un solo día que pase yo en el tribunal se convencerá que no soy la persona adecuada, porque el sistema es erróneo. Por humildad no le estaba diciendo la verdad. O puedo existir yo, o puede existir su ley, su orden y su sociedad. Así que… intentémoslo….

El primer día trajeron al tribunal a un ladrón que había robado casi la mitad de la fortuna del hombre más rico de la capital. Lao Tse escuchó el caso, y luego dijo que tanto el ladrón como el hombre más rico deberían ir a la cárcel durante seis meses.

– «¿ Qué está diciendo usted? Me han robado, me han desvalijado….¿Qué tipo de justicia es esta, que me está mandando a la cárcel el mismo período de tiempo que al ladrón?» – dijo el rico.

– «Ciertamente no estoy siendo justo con el ladrón. Usted tiene más necesidad de estar en la cárcel, porque ha acumulado tanto dinero para usted mismo, ha privado a tanta gente de dinero….Miles de personas están en la miseria y usted sigue acumulando mas y mas dinero. ¿Para qué? Su propia avaricia está creando estos ladrones. Usted es el responsable. El primer delito es suyo» – respondió Lao Tse.

La lógica de Lao Tse es absolutamente clara. Si va a haber demasiada gente pobre y solo unos pocos ricos, no se puede evitar los robos. La única manera de evitarlos es tener una comunidad en la que todos tengan lo suficiente para satisfacer sus necesidades básicas y desarrollar sus capacidades creativas y su vida. Y nadie acumule innecesariamente solo por avaricia.

– » Antes que me envíe a la cárcel, quiero ver al emperador, porque esto no es conforme a la constitución, esto no es conforme a la ley del país» – protestó el rico.

– » Eso es culpa de la constitución y culpa de la ley del país. Yo no soy responsable. Vaya a ver al emperador» – replicó Lao Tse.

El rico le dijo al emperador: – » Escuche, este hombre debería ser depuesto de su cargo inmediatamente, es peligroso. Y es muy racional. Lo que dice es correcto, puedo entenderlo, ¡pero nos destruirá! » –

El emperador lo comprendió perfectamente bien: » si este rico es un criminal, entonces yo soy el mayor criminal del país. Lao Tse no dudará en enviarme a la cárcel».

Lao Tse fue eximido de su cargo. Y dijo:

– » Intenté decírselo antes; me está haciendo perder el tiempo innecesariamente. Le dije que no soy la persona adecuada. La realidad es que su sociedad, su ley y su constitución no están en lo correcto. Necesita gente errónea para hacer funcionar este sistema erróneo».

El camino de la libertad
la libertad depende de la consciencia del hombre

Ese sistema tomó tanta fuerza y tanto poder porque dejaste de crecer, porque si sos capaz de crecer, de convertirte en un individuo, observador, alerta, consciente, despierto, no habría necesidad de toda esa gente. Perderán su trabajo, su prestigio, su poder, su liderazgo, su escalafón, su sacerdocio, su papado, desaparecerá todo. Lo que al principio podría haber sido bueno para ordenar y crecer, se convirtieron en los enemigos del hombre.

 

La salida para vivir como HOMBRES, salir del limbo es desarrollar tu propia consciencia. La alquimia de la transformación interna, de tu transformación interna. Poco a poco se te

abrirán otros horizontes, irás cambiando. Y cuando te hayas transformado completamente en un individuo totalmente consciente, te sentirás y estarás fuera de la prisión, ya no serás un esclavo. Serás un hombre.

Sos un esclavo a causa de tu propio caos.

Un hombre consciente es libre.

 

 

Santa Lucía - Commelina erecta

2 de febrero de 2025